Nacida en el barrio neoyorquino del Bronx en la década de los setenta, se ha erigido como la actriz hispana mejor pagada de Hollywood y una estrella de la música pop.
Pero si bien como actriz, esta explosiva mujer ya había demostrado su talento con cintas como Selena o Un romance muy peligroso, no dio el salto al mundo de la música hasta 1999, cuando grabó una maqueta y la envió a las discográficas. Tommy Mottola -director de Sonic Music- quedó impresionado con sus ritmos. La llamó y López firmó el contrato discográfico en el acto
Jennifer estudió canto y baile en su infancia. Este aprendizaje le sirvió para dar inicio a su carrera profesional como bailarina en videos musicales de cantantes como Puff Daddy (de quien se hizo novia) y Janet Jackson. Con posterioridad la propia Jennifer Lopez triunfó en el mundo de la canción, debutando en 1999 con el disco “On the 6” Más de una década antes, en el año 1986, Jennifer ya había comenzado su carrera en el cine al intervenir en la película “My Little Girl” en los comienzos de la siguiente década trabajó asiduamente en emisiones televisivas, apareciendo en series como “In Living Colour” (1990), “Second Chances” (1993), “South Central” (1994) o “Hotel Malibu” (1994).
Desde su espectacular actuación en la película Selena, en la que recreaba a una cantante mexicana, la actriz no ha parado de rodar: Sangre y vino, donde enamora a Jack Nicholson, Anaconda, en la que aparece alrededor de 30 serpientes drogadas, Giro al infierno, y, finalmente La celda o Angel Eyes. López no descansa Pero López no quiere alejarse del mundo de la canción y sin perder un momento se ha puesto a trabajar en su próximo disco. Y es que López considera que el cine y la música forman parte de una misma carrera.
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